Los criterios de aceptación en las historias de usuario son un componente esencial en la metodología Scrum y otros marcos de trabajo ágiles. Estos criterios sirven como una hoja de ruta clara y concisa que guía al equipo sobre lo que exactamente se espera lograr con una historia de usuario específica.
En el contexto de desarrollo de software y gestión de proyectos, una historia de usuario es esencialmente una descripción de una funcionalidad deseada, escrita desde la perspectiva del usuario final. Sin embargo, debido a que estas historias pueden ser subjetivas y basadas en percepciones, es esencial tener criterios claros que dicten cuándo se ha cumplido esa historia y cuándo no.
Los criterios de aceptación se convierten en esa herramienta objetiva que asegura que todas las partes involucradas tengan la misma comprensión de lo que se necesita para completar la historia. En otras palabras, actúan como un contrato entre el equipo de desarrollo y el propietario del producto, garantizando que se cumplan las expectativas y que el producto final sea de la calidad deseada.
Es importante señalar que los criterios de aceptación no son solamente una lista de tareas a realizar. En su lugar, delinean las condiciones específicas bajo las cuales una función o característica es considerada completa. Estos criterios son esenciales para el proceso de revisión del sprint, ya que ayudan al equipo a determinar si han cumplido con las expectativas del propietario del producto.
Además de proporcionar claridad al equipo de desarrollo, los criterios de aceptación también benefician al propietario del producto y a las partes interesadas. Al tener criterios claros y definidos, estas partes pueden tener la certeza de que las historias de usuario se están abordando de manera adecuada y que el producto final satisfará las necesidades del usuario final.
Finalmente, es vital que los equipos se tomen el tiempo necesario para desarrollar criterios de aceptación sólidos y comprensivos. Al hacerlo, no solo garantizan que se cumplan las expectativas, sino que también aseguran una comunicación fluida y efectiva entre todas las partes involucradas.
El propietario del producto, junto con el equipo, establece los criterios de aceptación. Estos criterios se definen a través de discusiones colaborativas y análisis detallados de la historia de usuario, considerando siempre las necesidades del usuario final. Por lo general, se establecen durante la fase de refinamiento del backlog o la planificación del sprint. Herramientas como JIRA, Trello, o cualquier otro software de gestión de proyectos se suelen utilizar para documentar y seguir estos criterios.
Algunos ejemplos son los siguientes:
1.Historia de usuario: Como cliente, quiero poder restablecer mi contraseña en caso de que la olvide.
– Criterio de aceptación: El usuario recibe un correo con un enlace para restablecer la contraseña dentro de los 5 minutos después de hacer la solicitud.
2.Historia de usuario: Como administrador, quiero poder ver un registro de todas las transacciones realizadas en el sitio.
– Criterio de aceptación: El administrador puede filtrar las transacciones por fecha, usuario y tipo de transacción.
3.Historia de usuario: Como usuario, quiero recibir notificaciones cuando haya nuevas actualizaciones en mi aplicación favorita.
– Criterio de aceptación: Las notificaciones se envían automáticamente a los usuarios 24 horas antes del lanzamiento de una nueva actualización.
4.Historia de usuario: Como comerciante, quiero poder ofrecer descuentos a mis clientes habituales.
– Criterio de aceptación: Los clientes que hayan realizado más de 10 compras en un mes reciben automáticamente un descuento del 10% en su próxima compra.
5.Historia de usuario: Como lector, quiero poder marcar artículos para leer más tarde.
– Criterio de aceptación: Los artículos marcados se guardan en una lista separada y se pueden acceder sin conexión a internet.