Dentro de la metodología ágil Scrum, la gestión de riesgos es una parte crucial para garantizar la entrega exitosa de productos o soluciones. Uno de los mecanismos para gestionar estos riesgos es la “Reunión de Riesgos”. La esencia de esta reunión radica en la capacidad de identificar, analizar y priorizar los riesgos relacionados con el proyecto. Cuando hablamos de riesgos, nos referimos a cualquier evento o circunstancia que pueda afectar el logro de los objetivos del sprint o del proyecto en general.
El Product Owner, una figura clave en Scrum, tiene la responsabilidad de convocar a esta reunión. Es el encargado de reunir al equipo principal de Scrum y, en ciertas circunstancias, puede optar por invitar a stakeholders o interesados relevantes del negocio. Estos últimos aportan perspectivas y preocupaciones adicionales que podrían no ser evidentes para el equipo de desarrollo, pero que son vitales para el negocio.
Priorizar riesgos significa determinar qué riesgos deben ser abordados primero basándose en su impacto y probabilidad de ocurrencia. En esta reunión, no solo se identifican riesgos, sino que también se discuten estrategias para mitigarlos o responder ante ellos. Las decisiones tomadas durante esta reunión deben estar alineadas con los objetivos del sprint y del proyecto, asegurando que se tomen las medidas necesarias para prevenir cualquier impedimento.
La frecuencia de estas reuniones puede variar. Si bien no es una ceremonia oficial de Scrum como lo son el Daily Standup o la Retrospectiva, su importancia es innegable. Los equipos ágiles que enfrentan entornos de alta incertidumbre o que trabajan en proyectos con alto riesgo, podrían beneficiarse de realizar estas reuniones con más regularidad.
La “Reunión de Riesgos” es convocada por el Product Owner. Se lleva a cabo reuniendo al equipo principal de Scrum y, si es necesario, a los stakeholders o interesados relevantes del negocio. Esta reunión se realiza cuando el Product Owner identifica la necesidad de discutir y priorizar riesgos, lo cual puede ser al inicio de un sprint, antes de una release o cuando surgen circunstancias imprevistas. La herramienta principal para esta actividad es la comunicación efectiva, aunque se pueden utilizar tableros de riesgos o herramientas digitales para registrar y monitorizar los riesgos identificados.
Algunos ejemplos son los siguientes:
- En un proyecto de desarrollo de software, el equipo identifica que la integración con un tercero puede representar un riesgo debido a la inestabilidad de su API.
- Durante el desarrollo de una aplicación móvil, se reconoce el riesgo de no cumplir con ciertas normativas de privacidad en mercados extranjeros.
- Un equipo que trabaja en una plataforma e-commerce se da cuenta del riesgo de no poder manejar grandes volúmenes de tráfico durante el Black Friday.
- En el desarrollo de un juego, el equipo encuentra un riesgo potencial en la dependencia de una herramienta de diseño gráfico que está en fase beta.
- Un proyecto de migración de datos podría enfrentar riesgos relacionados con la incompatibilidad entre sistemas antiguos y nuevos.