Los resultados de la evaluación o benchmarking son esenciales para determinar cómo una organización o proyecto está funcionando en comparación con las mejores prácticas en la industria o en comparación con sus propios estándares pasados. Este proceso de evaluación puede abarcar desde procesos internos, productos y servicios, hasta prácticas de gestión. Según el SBOK, los resultados de este benchmarking exigirán principalmente una revisión y, si es necesario, una actualización de las prácticas recomendadas por el Scrum Guidance Body. Estas actualizaciones son vitales para asegurarse de que el equipo Scrum está alineado con las mejores prácticas y está produciendo trabajo de la más alta calidad. Por otro lado, los resultados también pueden jugar un papel crucial en la configuración de un estándar mínimo para el desarrollo de productos o servicios. Es vital no sólo mantenerse al día con las mejores prácticas, sino también asegurarse de que los estándares no se estanquen. Además, estos resultados pueden influir en los criterios de finalización de un proyecto. Si se identifica una brecha o área de mejora, es posible que se necesite ajustar estos criterios para asegurarse de que se alcance el nivel de excelencia deseado. Por último, en el ámbito del programa o portafolio, los resultados del benchmarking pueden inspirar al Product Owner a considerar nuevas épicas. Estas épicas pueden centrarse en la implementación de las mejores prácticas identificadas, asegurando que el equipo esté siempre avanzando y mejorando.
El proceso de evaluación o benchmarking es realizado por el equipo de Scrum en colaboración con el Scrum Master y Product Owner, utilizando recursos externos si es necesario. Se realiza comparando las prácticas actuales del equipo con las mejores prácticas identificadas por el Scrum Guidance Body y otros estándares de la industria. Aunque puede realizarse en cualquier momento, a menudo se realiza al final de una iteración o fase del proyecto para identificar áreas de mejora. Se realiza utilizando herramientas de evaluación, métodos de benchmarking y las recomendaciones del Scrum Guidance Body del SBOK.
Algunos ejemplos son los siguientes:
- Un equipo de desarrollo de software descubre que su proceso de pruebas no está alineado con las últimas mejores prácticas y, tras un benchmarking, decide implementar nuevas herramientas y técnicas.
- Una empresa de e-commerce se da cuenta, mediante una evaluación, de que su tiempo de respuesta al cliente está por debajo del estándar de la industria y decide establecer nuevas épicas para abordar este desafío.
- Un Product Owner identifica, a través del benchmarking, que la funcionalidad de la aplicación que su equipo está construyendo no es tan intuitiva como las aplicaciones líderes en el mercado y propone mejoras.
- Después de revisar los resultados de la evaluación, un equipo de marketing se percata de que su estrategia de contenido no está generando el engagement deseado y decide reevaluar y ajustar su enfoque.
- Una start-up, al comparar sus prácticas de gestión de proyectos con las del SBOK, descubre áreas de mejora y se embarca en un programa de formación para su equipo.