En la gestión de proyectos, un “Requisito” es una condición o capacidad que debe estar presente en un producto, servicio o resultado para satisfacer una necesidad de negocio, según lo define el PMBOK 6. Los requisitos son una parte integral de cualquier proyecto, ya que establecen las expectativas claras de lo que se espera obtener al final del proyecto. Son la base sobre la que se construye todo el proyecto, ya que dictan el alcance, los entregables y las metas de este.
Una parte crucial de la recopilación de requisitos es la comprensión precisa de lo que el negocio necesita. Esto a menudo implica un proceso de comunicación detallado con los interesados para identificar sus necesidades y expectativas. Un buen entendimiento de los requisitos no solo ayuda a establecer metas y objetivos claros, sino que también puede evitar cambios innecesarios y retrasos en el proyecto.
Una vez que se han definido los requisitos, se deben documentar de manera clara y precisa. Esto ayuda a garantizar que todos los miembros del equipo del proyecto entiendan las expectativas y sepan lo que se necesita para cumplir con los requisitos. La documentación de los requisitos también proporciona una base para el seguimiento y control del proyecto, ya que permite comparar los resultados reales con los esperados.
Los requisitos pueden cambiar a lo largo del proyecto debido a factores como el cambio de prioridades de negocio, la aparición de nuevas tecnologías o la respuesta a los problemas encontrados durante la ejecución del proyecto. La gestión efectiva de estos cambios de requisitos es crucial para mantener el proyecto en el camino correcto y garantizar que el resultado final cumpla con las necesidades del negocio.
Es importante señalar que no todos los requisitos son iguales. Algunos son obligatorios, lo que significa que el proyecto no puede considerarse exitoso a menos que se cumplan. Otros pueden ser deseables, pero no esenciales, lo que proporciona cierta flexibilidad en la ejecución del proyecto. Comprender esta distinción puede ayudar en la priorización de las tareas del proyecto y en la asignación de recursos.
Por último, la verificación de los requisitos es una parte integral de la finalización del proyecto. Esto implica comprobar que el producto, servicio o resultado final cumple con los requisitos establecidos. Este proceso ayuda a garantizar que el proyecto haya logrado sus objetivos y que se satisfagan las necesidades del negocio.
En el contexto de la gestión de proyectos, la recopilación, documentación y gestión de los “Requisitos” es normalmente responsabilidad del gestor de proyectos, aunque también puede involucrar a otros miembros del equipo, como analistas de negocio o expertos técnicos. El proceso implica la identificación de los requisitos a través de técnicas como entrevistas, grupos de enfoque, encuestas, análisis de documentos, etc., y luego documentándolos de manera precisa y clara. Esto se hace durante la fase inicial de planificación del proyecto y se revisa y actualiza a lo largo de la vida del proyecto a medida que las circunstancias cambian o surgen nuevos requisitos.
Algunos ejemplos son los siguientes:
- Requisito funcional: En un proyecto de desarrollo de software, un requisito funcional podría ser que el software debe permitir a los usuarios cargar y descargar archivos.
- Requisito de rendimiento: En un proyecto de construcción, un requisito de rendimiento podría ser que el edificio debe ser capaz de soportar ciertos niveles de fuerza del viento.
- Requisito de negocio: En un proyecto de implementación de ERP, un requisito de negocio podría ser que el sistema debe ser capaz de generar informes de ventas en tiempo real.
- Requisito legal: En un proyecto de desarrollo de un producto médico, un requisito legal podría ser que el producto debe cumplir con ciertas regulaciones de la FDA.
- Requisito de usuario: En un proyecto de desarrollo de una aplicación móvil, un requisito de usuario podría ser que la aplicación debe ser fácil de usar y tener una interfaz de usuario intuitiva.